Fisioterapia Oncológica
La lucha contra el cáncer evoluciona constantemente, la detección temprana y los avances en los tratamientos aumentan las posibilidades de cura. Con más personas superando el cáncer surge un nuevo conjunto de desafíos: los efectos secundarios de sus tratamientos y sus secuelas.
El cáncer es una enfermedad compleja que puede afectar varios sistemas del cuerpo. Los síntomas del cáncer pueden variar según su tipo y ubicación y pueden ser tratados con cirugías, quimioterapias, radioterapias. Cada uno de los tratamientos específicos impacta el organismo de los pacientes de forma particular.
La fisioterapia oncológica ofrece un acompañamiento personalizado durante los tratamientos médicos para controlar sus efectos y favorecer la calidad de vida del paciente oncológico en esta jornada. Es el recurso que cierra la brecha entre la atención médica y la calidad de vida del paciente oncológico.
Cáncer de mama:
Tratamiento quirúrgico:
Alteraciones en la cicatrización
Síndrome de la red axilar
Seromas
Síndrome doloroso post quirúrgico
Alteraciones posturales
Linfedema
Post Radioterapia
Radiodermitis
Fibrosis inducida por radioterapia
Post Quimioterapia
Neuropatías periférica inducida por quimioterapia
Fatiga
En Mifisio Onco hemos establecido un método de tratamiento seguro que permita a nuestros pacientes beneficiarse de la fisioterapia de forma oportuna.
Nuestro método consta de 4 fases, cada fase tiene un enfoque específico para abordar las necesidades y desafíos particulares de los pacientes en las diferentes etapas de su tratamiento médico.
Fase de Diagnóstico y Preparación para Tratamientos Físicos: Esta fase inicial es crucial para proporcionar apoyo emocional y educación a los pacientes recién diagnosticados. La preparación física para los tratamientos puede incluir la optimización de la salud general y la resistencia.
Fase Activa durante Quimioterapia o Radioterapia: Durante esta fase, los pacientes pueden experimentar efectos secundarios y desafíos físicos asociados con los tratamientos. El enfoque aquí puede estar en el manejo de síntomas, el apoyo nutricional y la adaptación a los cambios físicos.
Fase Post-Tratamiento y Recepción del Alta Médica: Después de completar los tratamientos, los pacientes pueden enfrentarse a la transición hacia una vida sin tratamiento activo. En esta fase, el enfoque podría centrarse en la recuperación, el seguimiento y el apoyo para la reintegración a la vida cotidiana.
Fase de Implementación de un Programa de Ejercicio Físico como Hábito de Vida: Esta fase destaca la importancia de mantener un estilo de vida saludable después del tratamiento oncológico. La actividad física puede desempeñar un papel crucial en la recuperación y en la mejora de la calidad de vida a largo plazo.
Los pacientes que se someten a tratamientos médicos contra el cáncer y reciben tratamiento complementario con fisioterapia sufren menos efectos secundarios del tratamiento médico, mantienen un nivel de funcionalidad e independencia mayor y son capaces de tolerar mejor los tratamientos.
La intervención temprana con terapia física actúa para evitar que se desarrollen secuelas, como el linfedema o fibrosis por radiación que pueden afectar la calidad de vida de los pacientes a largo plazo.
La fisioterapia oncológica hace que el tratamiento contra el cáncer sea mejor tolerado y que sus impactos en el cuerpo sean mínimos. Es el recurso que favorece la calidad de vida y el bienestar de los pacientes.